8 Consejos para Superar el Jet Lag
El jet lag es un trastorno temporal del sueño que afecta a los viajeros que cruzan más de tres zonas horarias. En términos sencillos: es cuando vas de viaje y estás cansado (y despierto) en los momentos inapropiados. Normalmente, el cuerpo sabe exactamente cuándo es el momento de dormir o de comer. Sin embargo, una vez que empiezas a cruzar zonas horarias todo se confunde y tu reloj interno ya no coincide con el entorno. El jet lag puede hacer que te sientas irritable, tengas náuseas y causa incluso dolores de cabeza y malestar estomacal. Es exactamente lo que no quieres en sus vacaciones, así que aquí están nuestros ocho consejos para superar el jet lag y asegurarte de que ajustas el reloj interno sobre la marcha.
AJUSTA ANTES DE SALIR
No te limites a hacer la maleta antes de tu viaje, ajusta también tu ritmo interno: cambia los horarios de comida y de irte a la cama para que sean más parecidos a los horarios de tu destino de viaje, los incrementos de 30 minutos son factibles y pueden hacer maravillas. Cuando vayas de viaje desde Europa a los Estados Unidos, por ejemplo, trata de quedarte levantado media hora más durante varias noches consecutivas antes de salir. (A la vuelta tendrás que irte a la cama antes).
AJUSTA TU RELOJ JUSTO DESPUÉS DE SALIR
Tan pronto como salgas, ajusta tu reloj a la hora de tu destino y, a continuación, haz como que vives en la nueva zona horaria: si todo el mundo duerme en el lugar de destino intenta dormir un poco en el avión. Cuanto más rápido adoptes el nuevo ritmo, mejor.
¡DI «SALUD»!
Hay que mantenerse hidratado, sobre todo durante el vuelo. Asegúrate de beber mucha agua en el avión y de mantenerte hidratado después de aterrizar, ya que la deshidratación puede empeorar los síntomas del jet lag.
LLEVA LAS COSAS DÍA A DÍA
Por lo general tu cuerpo necesita un día por zona horaria para ajustarse, así que si vuelas desde Londres a Nueva York pasarán unos cinco días hasta que tu cuerpo esté totalmente adaptado a tu nueva zona horaria.
VE HACIA EL OESTE
Esto no debería cambiar tus planes de viaje, pero es interesante saberlo: si vuelas hacia el este el jet lag suele ser peor.
¡NADA DE SIESTAS!
Una vez que llegues intenta no tomar siestas de más de dos horas, a pesar del largo y agotador vuelo y de una llegada temprano por la mañana (cuando solo puedes pensar en siestas, almohadas y camas). Distráete. Con un paseo, por ejemplo.
CAMINA
Caminar es siempre una buena idea, sobre todo después de estar sentado en un avión durante horas. Permanece activo, haz un pequeño recorrido turístico y siente la luz natural, esta es una de las maneras más efectivas de restablecer tu reloj interno.
HAY UNA APLICACIÓN PARA ESO
Jet Lag Rooster crea un plan personal para el jet lag basándose en tu ubicación y destino, tu plan de vuelo y tu ritmo habitual de sueño/vigilia. La aplicación, a continuación, determina cuando tienes que salir y exponerte a la luz, y cuando tienes que estar en la oscuridad. Suena un poco inquietante, pero puede ayudarte a ajustar tu reloj interno y reducir los efectos del jet lag.